Desde el principio en Artigot Catering hemos tenido eventos particulares, ya fuera en nuestro restaurante, en nuestro showroom o en las casas o espacios reservados para la celebración.
Suelen ser compromisos de amigos, familiares o de clientes.
¿Y qué ha pasado a lo largo de estos 10 años?
Que lo que fue una primera comunión, derivó por el boca a boca y la asistencia de otros padres al evento, en otras más, lo mismo que pasa con las bodas: que de una boda sale otra.
Es muy difícil acceder al público en general, con la pandemia desarrollamos un catering en delivery para celebraciones particulares publicado en la web …., que no tuvo ningún éxito.
Sin embargo, el número de catering para eventos particulares se ha multiplicado en Artigot y tenemos muchos clientes recurrentes. Como nos dijo uno de ellos hace poco, les compensa pagar algo más por lo bien que quedan con sus invitados, por el trabajo que se ahorran en prepararlo, porque no utilizan sus manteles, vajillas etc y porque se queda todo recogido cuando nos vamos, y eso es algo que todo el que ha montado una celebración en su casa, agradece enormemente.
Estas celebraciones no suelen superar las 30 personas (durante la pandemia podían ser menos 10, invitando tan sólo a la familia más cercana), hay que comprender que en casas particulares el espacio es más reducido y, en general, tienen un jardín donde se desarrolla el servicio. Como adivinaréis, las celebraciones coinciden con el buen tiempo, para poder aprovechar el espacio al aire libre.
En Catering Artigot tenemos una oferta especial para estas celebraciones que incluyen cócteles, estaciones, menú infantil y menús sentados.
Nosotros siempre vamos antes del evento a visitar la casa para organizar el servicio, es muy importante contar con una cocina equipada y con suficiente potencia eléctrica si hay que llevar algo de maquinaria extra. Solemos aprovechar el mobiliario de la casa que vestimos con nuestros manteles, igual que los veladores de apoyo que llevamos y las barras de bebida. En general, la bebida se pone en barra y las cervezas en un corner con barreños.
En cuanto al orden en el servicio, primero comen los niños mientras los adultos toman una copa de bienvenida, para poder dedicarnos después al servicio de los mayores sin interrupciones.
En estas celebraciones llevamos 3 o 4 camareros, aunque el número aumenta si los comensales son más. En algunas ocasiones, en casa más grandes, hemos llegado a tener 100 personas: recuerdo con mucho cariño la celebración de un centenario en Fuente el Saz con una extensa familia de 3 generaciones detrás de la cumpleañera.
Después de la comida, es habitual que dejemos un camarero en la barra para servir los combinados con el alcohol que suele poner el cliente.
La realidad es que estos servicios de catering para eventos particulares no son muy rentables. E incluso en algunas ocasiones nos suponen un gran problema porque coinciden con muchas bodas en fin de semana, lo que complica muchísimo la búsqueda de camareros y de logística.
Es por este motivo que los eventos particulares los lleva la división de corporativo ya que no suele haber eventos de empresa en fin de semana y la división de bodas está a tope entonces.
Pero en Artigot Catering cuidamos de nuestros amigos y clientes. Nos esforzamos en dejar todo muy bonito, con plantas, centros de mesas, mantelerías de flores…, buscamos que la comida sorprenda y que se sientan bien atendidos. Son celebraciones muy importantes para ellos, con una gran carga emocional y tienen que quedar bien por encima de todo con los más allegados.
Como siempre es vital acertar con la oferta deseada, que no haya problemas a la hora de terminar y servir la comida y que el tiempo acompañe…, ¡cuántas veces hemos tenido que hacer cambios sobre la marcha por un inoportuno chaparrón!
La verdad es que son eventos difíciles, los llamamos “ir de safari” porque las condiciones de trabajo son bastante más complicadas que en un espacio de eventos.
Pero por la satisfacción final del cliente, la amabilidad y el agradecimiento que nos transmite, merece la pena el esfuerzo, ¡no os quepa duda!